Nada más emocionante que estar con el equipaje listo para disfrutar unas vacaciones increíbles a bordo de un fabuloso crucero. Hoy te vamos a contar cómo es el procedimiento de embarque y te vamos a dar algunos consejos para preparar ese momento previo al que seguramente será un viaje inolvidable.
Prácticamente todas las navieras programan el proceso de embarque de sus pasajeros para que sea entre 2 y 3 horas antes de zarpar y algunas incluso ofrecen un pre check-in desde sus páginas web, puedes confirmar este dato directamente con la naviera. Es importante que respetes el horario que te indiquen y organices la llegada al puerto con suficiente tiempo, contratando con anticipación algún servicio de taxi. Si no vives cerca, y tienes que trasladarte en avión o en autobús, planea tu llegada al menos una noche antes. Algunas agencias ofrecen los servicios de alojamiento previo o posterior al crucero, incluso con días extras para disfrutar de los atractivos del puerto. La puntualidad es importante porque los barcos, como los aviones, no esperan a nadie.
Seguramente revisaste una y otra vez para no olvidar nada. ¿Llevas ropa blanca, de cocktail y gala, además de tu disfraz? Asegúrate de cerrar bien tu equipaje y de ponerle las etiquetas en las que aparezcan correctamente todos tus datos. Las navieras suelen enviar varios juegos de etiquetas con anticipación a los pasajeros y en ellas vienen los datos tanto del barco en el que viajas, como el número de tu camarote. Estos datos son particularmente importantes si zarpas desde un puerto con mucho movimiento de cruceros. Deberás entregar tu equipaje en un lugar especialmente señalado de la zona de embarque, previamente al check-in, y sólo te quedarás con el equipaje de mano. En la mayoría de los casos, el equipaje se entrega en el camarote un par de horas después, así que asegúrate de tener en tu equipaje de mano tus objetos de valor, medicinas, dinero, computadora, fotocopia de tus documentos, así como una muda de ropa, tu traje de baño, zapatos cómodos y alguna prenda de abrigo.
Es importante saber que así como en los aviones, hay artículos que no pueden llevarse a bordo, incluyendo alimentos y bebidas de todo tipo. Estos son retenidos y entregados nuevamente cuando finaliza el viaje. Pregunta a la naviera si está permitido que lleves una botella de champaña para brindar al zarpar, pagando el correspondiente descorche. Consulta la lista de objetos permitidos en la página de la naviera, y contempla que el equipaje, tanto el documentado como el de mano, pasan por procesos muy estrictos de revisión, por lo que es conveniente que te apegues a las reglas.
Durante el check-in, deberás presentar todos tus documentos de viaje: carnet de identidad o identificación oficial, pasaporte, visas (si aplican) y boleto o ticket del crucero. Durante este proceso, te será entregada una tarjeta personal e intransferible, que será la forma de acreditar tu identidad durante el viaje, al desembarcar en los puertos y destinos, al volver a embarcar. Será además la llave de tu camarote y además tu tarjeta de consumo. Se entrega una tarjeta por cada pasajero y es importante no perderla. La naviera conserva todos los documentos de los pasajeros, y mismos que son devueltos presentando el cupón correspondiente justo antes de que finalice el viaje. Saca una fotocopia de cada pasaporte, visa y documento de identidad y llévalo contigo.
Recuerda que también será preciso que lleves la tarjeta de crédito que registraste al hacer tu reservación y compra, ya que a ésta se cargarán todos los gastos extras que hagas durante el viaje. Quizá tengas que avisar al banco que vas a hacer compras internacionales para evitar contratiempos.
Una vez que has hecho todo el proceso de embarque, podrás proceder a abordar. Algunas navieras montan una simpática escenografía cerca de la entrada del barco, o ya adentro, para invitar a los pasajeros a tomarse una foto para recordar tan feliz momento. Al otro día estará a tu disposición ya impresa y podrás adquirirla por un costo extra.
¡Buen viaje!